sábado, 26 de noviembre de 2016

DIY ~ Embossing

¡¡He vuelto!!


Después de este grande grandísimo parón, vuelvo a las andadas...



Hoy os traigo uno de los últimos descubrimientos que he hecho dentro del mundillo del lettering, el EMBOSSING. Por mi parte ha sido una rayada total.






¿Traducción al español? Ni idea. En algunos sitios he leído "estampado en relieve" o cosas parecidas, pero en la mayoría de los sitios aparece simplemente como embossing y punto. 



Consiste en la aplicación de unos polvillos que al aplicarles calor se derritan y den un efecto muuuuuuy chulo. Soy principiante todavía, así que las letras me quedan bastante chapuceras (lo siento de antemano), pero estoy bastante orgullosa de mis resultados con los sellitos.



No os cuento más rollo y pasamos a las demostraciones...



MATERIAL:



Me hice este finde con un pack de embossing de Lidl (si, en Lidl, yo tampoco lo hubiera dicho nunca), en el cual se incluye:



- Unos sellitos pequeños de cosiñas navideñas
- Tintas de colores 
- Un rotulador especial para embossing
- Los tres tarritos de polvos (dorado, plata y transparente).
- El secador-aplicador de calor. 


Además vienen unas plantillas de letras y números, pero a mí no me gustan demasiado, así que no creo que las use.







Los sellos más grandes los pedí por Aliexpress -el sitio perfecto para que la gente tocada de la cabeza como yo misma se vuelva más loca aún-.

El dorado y el plateado quedan muy bien sobre un fondo negro, así que usaré cartulinas normales y corrientes negras.

Tras un momento de pánico inicial tras ver el parecido del secador con el de la pistola de pegamento (y todos sabemos como acabó eso, y si no, en la entrada de la bola de nieve está muy clarito), empiezo a jugar con todo este material.

Primero vamos con lo que me ha quedado peor, el lettering en si mismo.

Usaremos el rotulador de embossing y los polvillos mágicos.





Truco del almendruco: yo le doy varias capas de tinta, hace que se peguen más polvillos y quede mejor (cosa que no pasa esta vez, lo voy avisando).

El siguiente paso es, MUY RÁPIDO, cubrir bien todo el texto con los polvillos, del color que os guste más, y esperar un poquillo. Es muy importante lo de la rapidez, ya que la tinte esta se seca a toda.



Esperáis un poquitín y volcáis los polvillos en un folio doblado para volver a meterlos en el bote y poder reutilizarlos.

¡Y pasamos a la parte chula! Vamos con el secador. A mi me resulta medio hipnótico el cambio de  textura al aplicarlo.



¡Y ya está! Se seca en nada y queda muy muy chulo para etiquetas, regalos, etc...

Os pongo aquí unas letritas que hice ayer y me quedaron bastante mejor que el intento de hoy...


Y ahora... ¡la joya de la corona! Una forma distinta de usar el embossing, con los sellitos de estampar de toda la vida.


Seguimos el mismo método:



Es más fácil, ya que esta tinta tarda más en secarse, empapa más y te da más margen.



El resultado es este:


O usando los polvillos transparentes:




Pues ya está todo dicho, ¡ahora a practicar y a disfrutar con esta técnica!